El Alzheimer es una enfermedad progresiva, degenerativa e irreversible, que afecta directamente a la memoria, lo que provoca que quien la padezca, con el tiempo, sea incapaz de realizar hasta las actividades más sencillas; por el momento, es incurable. Este trastorno afecta más a las mujeres y es más recurrente si se tiene un historial con síndrome metabólico, enfermedades cardiovasculares o depresión. Aunque hay países con una tasa de población más alta de adultos mayores, en México, se estima que, aproximadamente, un millón 300 mil personas padecen de esta enfermedad.
Dentro de los primeros síntomas notables, está que la persona afectada no recuerda lo que acaba de decir o hacer, se le dificulta planear o resolver problemas, desempeñar tareas habituales y se desorienta con respecto al lugar, espacio y tiempo. Después, cuando el Alzheimer ha progresado, empieza a perder la conciencia de su condición, sin embargo, puede experimentar angustia o, en su contraparte, manifestaciones de afecto. También, se le empiezan a dificultar las actividades más sencillas y cotidianas, como comer, asearse o vestirse, hasta que ya no las puede hacer más.
Por la manera en la que afecta este padecimiento, las personas enfermas por éste necesitan ser cuidadas las 24 horas del día. Por ese motivo, es entendible que cubrir sus demandas sea un trabajo arduo y que los familiares estén en constante búsqueda de tecnologías que los ayuden a mejorar la calidad de vida de los pacientes.
Una de las preocupaciones principales para quienes cuidan a una persona con esta enfermedad es que ésta se extravíe. Y es que, según la Alzheimer’s Association, seis de cada diez personas con demencia deambularán solas, al menos, una vez. La razón principal de ello es que se encuentran realizando sus actividades diarias, como salir al centro comercial, caminar cerca de la casa o patio, o van a un lugar definido, pero, de un momento a otro, se desorientan y olvidan cómo regresar. Cuando esto pasa, se desencadena una alarma, que afecta tanto al círculo más cercano del paciente como a él mismo, lo cual puede llegar a ser contraproducente en su tratamiento.
Afortunadamente, se ha pensado en un producto para ellos, que les ayudará a regresar seguros con sus cuidadores o familiares.
Una empresa japonesa, llamada Wish Hills, ha presentado, al público, unos zapatos con GPS incluido, pensados, precisamente, para las personas con Alzheimer. Llevan por nombre GPS Dokodemo Shoes y envían notificaciones, a los familiares o cuidadores del paciente, cuando éste se aleja de casa. El localizador se encuentra en la suela del zapato izquierdo, y esto es porque, a diferencia de los relojes o pulseras, el calzado no es un accesorio que se pueda quitar o extraviar con facilidad y es una prenda que la mayoría de personas usa.
Su funcionamiento es sencillo: el pequeño dispositivo incluido en el zapato se vincula, mediante una aplicación, al teléfono móvil o a la computadora, y cuando la persona se aleja más de 50, 100 ó 500 metros de su casa (las distancias se pueden modificar), se emite una alarma, que llega a los celulares y ordenadores de las personas encargadas del paciente, proporcionándoles su ubicación.
Hasta el momento, este calzado sólo está disponible en Japón (país de donde es original este producto) y se está vendiendo en alrededor de 300 euros, que equivalen, aproximadamente, a 6 mil pesos mexicanos. No obstante, se espera que la demanda mundial impulse que los zapatos se exporten a otros lugares, principalmente aquellos que tienen un alto índice de gente envejecida y con problemas de demencia y Alzheimer.
Por otro lado, también, en América, existe una propuesta similar, pues Richard Aguilar, un empresario, originario de Trujillo, presentó, en la feria ‘Perú con Ciencia’, unos zapatos de cuero, que tenían un dispositivo de geolocalización. Se diferencian de los GPS Dokodemo Shoes en que su chip se encuentra detrás de la lengüeta, para pasar desapercibido y que no le cause ninguna incomodidad a su portador. Además, cuentan con un botón de pánico, para enviar un mensaje de texto, en automático, a la persona que tenga registrada, sin mencionar que, solamente, necesitan cargarse por 20 minutos, para tener una durabilidad de dos días.
Ambos artículos son una nueva oferta en cuanto a dispositivos portátiles que tienen el fin de brindar tranquilidad a los pacientes con Alzheimer y, sobre todo, a sus familiares, ya que, gracias a ellos, tendrán la certeza de dónde se encuentra la persona enferma y, en caso de que se extravíe, podrán encontrarla fácilmente y evitar que sufra algún peligro.