Se celebra cada 27 de julio, con el objetivo de crear conciencia en la población humana, sobre la problemática y la difícil vida de los perros de la calle, lugar al que llegan, principalmente, debido al abandono por parte de sus dueños, o bien, a la reproducción descontrolada de los ejemplares que ya se encuentran en esa situación.
La iniciativa surgió en el año 2008, cuando un estudiante chileno, Ignacio Gac, hizo una serie de publicaciones en redes sociales, para atraer la atención de la gente e invitarla a tomar acción en beneficio de los perros callejeros. Rápidamente, su movimiento fue apoyado por albergues, rescatistas y amantes de los canes y los animales, haciendo tanto eco que se extendió hacia otros países de Latinoamérica y del mundo.
Aunque es una lucha diaria por sacar a los perros de esta situación y por impedir que la problemática crezca, en este día, se da mayor impulso y difusión a las campañas de adopción y esterilización, a la donación monetaria o en especie a los albergues y al rescate de canes abandonados o en maltrato. La idea es evitar que, debido a la sobrepoblación canina callejera, los perros sean sacrificados. Ellos no pidieron ser abandonados ni nacer en esas condiciones, por lo que, si se encuentra en nuestras posibilidades, podemos darles o ayudarles a encontrar un hogar donde reciban el amor que merecen, con dueños responsables y comprometidos.
Comments