Valor añadido a favor de la salud de los clientes
Básicamente, una farmacia o droguería –como se le conocía antiguamente– es un establecimiento dedicado a la venta de medicamentos, material de curación o de primeros auxilios y otros productos sanitarios básicos relacionados con la medicina y el cuidado de la salud.
Anteriormente, en décadas o siglos pasados, esa acción correspondía a las entonces llamadas boticas, en las que, además, el boticario –persona que las atendía– solía preparar los medicamentos casi al momento, en función de las necesidades de cada paciente. Posteriormente, debido al desarrollo y crecimiento de la industria farmacéutica, estos lugares se enfocaron sólo en las labores de venta; sin embargo, hoy en día, en un mundo en el que se valora el multitasking, en donde el capitalismo ha impulsado la competencia y que está dominado por el internet, el concepto de farmacia se está transformando de nuevo, buscando que cada uno de estos establecimientos adquiera una diferenciación y un posicionamiento respecto del resto, mejorando la atención y experiencia de compra de los clientes-pacientes, que son lo más importante.
Es así como están surgiendo las llamadas farmacias de servicios, que pretenden poseer un valor agregado, ofreciendo otros servicios médicos, además de la venta de fármacos, enfocados a restablecer, cuidar y conservar la salud de los pacientes. Están orientadas al público que busca soluciones rápidas a situaciones de salud sencillas, desde información, consejos o indicaciones sobre la administración de medicamentos hasta consultas médicas o realización de estudios clínicos simples, entre otros. De este modo, el objetivo de las farmacias de servicios es proporcionar una atención integral en la medida de sus posibilidades.
Una de las primeras formas en que las farmacias convencionales comenzaron a migrar a la modalidad de servicios (aunque, quizá, todavía no existía el término como tal) fue con la inclusión de un consultorio médico, y existen algunas que también poseen un pequeño laboratorio, donde se realizan ciertos estudios y análisis de sangre u orina. Aunque estos servicios son de los más populares y recurridos, existen muchos otros que se pueden ofrecer para dar una atención más completa y diferente a los pacientes.
Si usted desea transformar su farmacia en una de este estilo, es importante que sepa que, antes de intentar brindar algún servicio adicional, es necesario considerar tres factores, que pueden ayudar a asegurar el éxito y la aceptación:
1. Entorno: Se debe investigar y analizar “el terreno de venta” en el que está posicionada la farmacia; es decir, estudiar a los clientes y sus hábitos de compra, o a las personas a las que se quiere llegar, así como a la competencia. Eso sirve para planear estrategias que satisfagan las necesidades de los consumidores y que sean diferentes o innovadoras respecto a los demás negocios como el nuestro.
2. Equipo: Se refiere a contar con las mejores herramientas para desempeñar las labores de cada servicio que se pretende ofrecer; esto incluye: los mejores proveedores de productos, profesionales de la salud especializados en su campo, expertos en el manejo de ciertos equipos o maquinaria, así como personal capacitado para brindar atención e información precisa y certera; incluso, también, la infraestructura y las instalaciones de primer nivel o en buenas condiciones tanto de funcionamiento como de higiene.
Todo ello, en conjunto, ayudará a que el cliente-paciente sienta más confianza y seguridad en la farmacia.
3. Recursos: Este punto va un poco de la mano del anterior, pero se enfoca en los pagos iniciales o periódicos que se tienen que hacer para impulsar y mantener ciertos servicios. Se debe evaluar el dinero con el que se cuenta, los presupuestos y determinar si, entonces, es viable ofrecer el servicio o no, o con qué limitantes. Es importante señalar que se trata de una inversión, buscando que rinda frutos a futuro; es por ello que los gastos no deben verse como un derroche, pero deben estudiarse bien si no se quiere tener pérdidas.
Un buen manejo de las finanzas permitirá ver la posibilidad de ofrecer, en principio o a futuro, algunos servicios gratuitos que sean más atractivos para el público, o bien, a precios accesibles, que, aun así, representen un ingreso para la farmacia.
De igual manera, en este rubro de recursos, se considera el resurtido constante y el buen estado de los medicamentos y de los demás productos sanitarios.
Eligiendo los servicios
Una vez evaluados los tres puntos anteriores, se puede comenzar a planificar los servicios adicionales que se podrían ofrecer en la farmacia. Lo bueno de esta época es que se puede sacar provecho del internet, conjugando así la experiencia online con la tradicional en físico.
Es importante resaltar que, antes de impulsar los servicios deseados, se debe considerar la cuestión legal; es decir, contar con todos los permisos requeridos de sanidad u otros, y cumplir con todo lo reglamentado.
Otro punto a tener en cuenta es el giro de la farmacia; si bien, la mayoría de las que conocemos son de medicamentos en general, existen muchas otras que se enfocan en un área específica, como la dermatología, la salud bucal, la fertilidad, etcétera. Esa especialización del negocio es un punto que se puede aprovechar para brindar servicios todavía más exclusivos, que harán que la farmacia se diferencie del resto.
Si se trata de una farmacia general, recuerde que no es recomendable querer abarcar todos los campos; a veces, menos es más, por lo que es mejor centrarse en pocas cosas.
A continuación, le presentamos algunos servicios que se pueden brindar en una farmacia, y dependiendo de la orientación de cada una, éstos se pueden delimitar, enfocar o adaptar a los temas que le competan.
- Control de glucosa
- Seguimiento farmacoterapéutico
- Programa de mantenimiento y dispensación de metadona
- Sistemas personalizados de dosificación
- Deshabituación tabáquica
- Medición del pulso y presión arterial, y monitorización ambulatoria de la presión arterial (MAPA)
- Cribados de enfermedades ocultas
- Formulación magistral
- Servicio de nutrición
- Médico general y médicos especialistas
- Medición de peso, talla e IMC
- Diagnóstico capilar ficados médicos
- Diagnóstico capilar
- Análisis clínicos, óptica, elaboración de dietas (con especialistas)
- Charlas y talleres sobre enfermedades y prevención
- Campañas de salud (con apoyo de instituciones reconocidas de salud)
- Servicio de ambulancias
- Actividades de ejercicio
En el medio online, no sólo basta con la venta de productos por internet, sino que, también, se pueden implementar otros, de corte informativo, como chats con el personal o con médicos para resolución de dudas o videoconsultas; así como un blog, videos comunicativos y tutoriales, y aplicaciones móviles.
Recuerde que es fundamental que los servicios farmacéuticos cuenten con una rigurosa gestión, planeación, seguimiento, modificación y actualización. El futuro de las farmacias ya está llegando con esta nueva modalidad, que tiene mucho por ofrecer y que se basa en el acercamiento humano y respetuoso con los pacientes, brindando un cuidado especializado de su salud y bienestar.
Fuente:
De la Fuente, L. (2017). Importancia del desarrollo de servicios para la farmacia. Farmacia Profesional. Vol. 31(6):11-14.
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