El aluminio, un material muy reciclable

El aluminio es un metal de baja densidad, ligero, blando, maleable, dúctil, de color plateado-blanco, altamente resistente a la corrosión y con buena conductividad eléctrica y térmica. Se extrae de un mineral llamado bauxita y, de acuerdo con National Geographic, es el elemento metálico más abundante en la corteza terrestre y el metal no ferroso más utilizado; sin dejar de mencionar que es el segundo metal más usado en la industria, tan sólo después del acero.

Pero, además de estas propiedades, el aluminio es uno de los materiales más interesantes y valorados debido a su gran capacidad de reciclaje. Y es que puede reciclarse indefinidamente sin perder calidad, lo que permite que sea utilizado una y otra vez en diversos productos, como latas, autopartes, aviones, material y accesorios tecnológicos, entre muchos otros.

Por otra parte, el reciclaje del aluminio representa un enorme ahorro energético, ya que dicho proceso consume un 95 % menos de energía que al producirlo.

Datos interesantes sobre el reciclaje del aluminio

• Se estima que alrededor del 75 % del aluminio producido desde el siglo XIX sigue en uso actualmente.

• El reciclaje de aluminio ayuda a reducir emisiones de CO₂ y a disminuir la explotación minera. Y es que una tonelada de aluminio reciclado (aluminio secundario) ahorra nueve toneladas de CO₂, evita la extracción de cuatro toneladas de bauxita y ahorra hasta 14,000 kWh de energía (equivalente al consumo de energía de un hogar durante un año).

• En Alemania y Japón, las tasas de reciclaje de aluminio superan el 90 %.

• En Latinoamérica, Brasil lidera esta industria, con una tasa de reciclaje de latas de aluminio de más del 95 %.

• El reciclaje de una sola lata de aluminio ahorra suficiente energía para hacer funcionar una televisión durante tres horas.

• La producción de aluminio desde la bauxita genera residuos llamados lodos rojos, que son altamente contaminantes, por lo que reciclar evita esa contaminación.

Final del formulario